El pescado es un ingrediente muy importante en nuestra cocina. Aprendé a elegirlo y cocinarlo correctamente para conseguir un plato perfecto en tu mesa.

Al momento de la elección del pescado, la calidad es uno de los factores que determina su sabor. Es importante que esté lo más fresco posible, si es congelado intentaremos que tenga la mejor calidad posible. Este factor es clave para poder obtener unos buenos resultados en la cocina. Para saber si es fresco, deberás tener en cuenta:

•  El pescado debe tener olor a mar.
•  Debe ser firme y elástico pero no blando.
•  Las escamas deben ser firmes.
•  Los ojos deben estar brillantes y abiertos.

Al momento de su cocción, no necesitará estar mucho tiempo cocinándose, solo el tiempo justo. Podés elegir hacerlo al horno, frito o a la parrilla, siendo este último el método de cocción ideal, sobre todo para piezas grandes.

Para evitar que el pescado al horno se pegue a la asadera, ubicarlo sobre un colchoncito de cebolla. Si se hace elegís hacerlo a la plancha es recomendable enharinarlo.

Si el pescado lleva una salsa, cocerlo en ella para no perder los jugos. La salsa toma todo el sabor.

Si querés que quede más jugosa y no se deshace, cociná el pescado con la piel que le da más sabor.

Para evitar que los filetes se rompan, sálalo y rocíalo con jugo de limón 2 hs. antes de cocinarlo.

Para saber cuando los filetes de pescado están a punto, si al ejercer un poco de presión con el dedo o con el mango del tenedor, se observa que la carne se desmembra con facilidad, están listos.

Espero les sirvan estos secretos y puedas incorporar a tu dieta este alimento maravilloso.