Estos dos productos pueden parecer iguales pero tienen sus diferencias en varios sentidos en cuanto a su origen, elaboración y composición. Las mismas hacen que cada una tenga propiedades y efectos distintos sobre la salud.
Su origen
La mantequilla es de origen animal, y la margarina es de origen vegetal.
Esta distinción es la que provoca diferencias significativas entre ambos productos tanto en la composición nutricional como en su elaboración.
Sabor y color
El color y sabor de la mantequilla se obtienen a partir de un proceso manual.
La margarina cuenta con color y sabor generados por aditivos.
Las grasas
La mantequilla procede de la leche, presentando un alto contenido en grasas saturadas y colesterol.
Por otro lado, la margarina procede del aceite vegetal como el aceite de oliva, girasol, maíz, etc. Y contiene grasas mono y polinsaturadas. Las más blandas, tienen menos grasa que las duras.
Sus minerales
La mantequilla contiene cantidades importantes de calcio, magnesio y fósforo de forma natural.
La margarina aunque es fuente de ciertas vitaminas, se le suelen añadir otras, así como minerales para enriquecerla.
Sus vitaminas
La mantequilla es rica en vitaminas A, D Y E, con potentes antioxidantes y absorción de calcio.
En el caso de la margarina solo destaca la presencia de vitamina E y K. Esta se enriquece con vitaminas añadidas
Calorías
La mantequilla cuenta con cerca de 750 calorías por cada 100 gramos
La margarina contiene cerca de 900 calorías por cada 100 gramos.
La elección dependerá del sabor que queramos en nuestra receta y de sus efectos sobre nuestra salud.
